La temporada 2022/23 de la NBA sin duda como cada año trae distintos atractivos. Para muchos lo es el formidable conjunto de los Warriors, el enésimo intento de las estrellas en los Lakers por funcionar y otros temas que acaparan los focos mediáticos. Pero, este año también trae consigo la oportunidad de ver un conjunto explotar a niveles sorprendentes, y estos son los New Orleans Pelicans.
El conjunto de la ciudad más musical de los Estados Unidos parece ser un equipo que ha logrado engranar todas sus piezas y hacerlas mover casi perfectamente al compás que dicta su Coach Willie Green. Las capturas en el mercado y ciertos ajustes en el sistema de juego durante la pretemporada, dejan entrever que la escuadra muestra una candidatura sólida para colarse en los Play Off de la presente edición de la NBA.
Aunque la predicción del arribo del conjunto a la post temporada es inferior al 70% según diversos sitios especializados de baloncesto. La franquicia no ha trabajado tanto en las oficinas para que las predicciones externas sean las que surtan efecto. Y es que hablando a las claras, el principal enemigo en el logro de un boleto a los Play Off para los Pelicans no es ni ningún equipo en particular, son las lesiones.
El sistema médico de New Orleans es la principal pesadilla de su GM y por ende de su Coach Principal. Año tras año no contar con Zion Williamson durante toda la campaña se volvió habitual desde su firma en 2019, algo que según se explicó, este año pudiera terminar.
El trabajo en el Off Season del Pick 1 de los Pelicans en 2019 puede ser la guinda al pastel de un proyecto que viene siendo ya la hora de que explote. CJ McCollum, Brandon Ingram, Jonas Valanciunas, José Alvarado y el resto de la plantilla se reunen alrededor de la estrella que ha sido opacada por las lesiones, pero que trae este año muchas ganas de despegar sin frenos.